Thursday, May 18, 2006

Lisa

Lisa

Estoy en un reformatorio.
Al final me he cansado de huir de la policía porque sabía que al final me iban a coger y que si me dejaba atrapar por ellos iría a este reformatorio pero cuando cumpliera mi mayoría de edad podría salir y no tener que seguir pagando por mis delitos, digamos cumplir mi castigo porque sino tendría otro mucho peor y eso me da miedo.
Samuel y yo hemos estado toda la tarde dando una vuelta por los alrededores y no hay nada interesante.
La comida de la cafetería está muy buena aunque yo pensaba que sería asquerosa.
Son las tres de la mañana y hace un rato he oído bullicio en el pasillo pero ya no se oye nada.
No he salido a ver que pasaba porque tenía miedo a que me hicieran algo o me castigaran.
Mi habitación está cerca de la de Samuel pero yo no la comparto con nadie y él la comparte con un chico llamado Tomás.
Creo que es el líder de una de las bandas de aquí, así que mejor no meterse con él, sino puede hacerte la vida imposible.
Cuando nos íbamos a nuestra habitación Samuel me ha acompañado a la mía y después él se ha ido a la suya para que no me pasara nada.
Mañana tengo a primera hora clase de arte y se me da fatal, así que le pediré ayuda a Alexandra porque por lo que he visto se le da muy bien dibujar y todo eso.
¡Tengo hambre! No sé si salir de mi habitación e ir a tomar algo a la cafetería, no sé porque me puedo encontrar con alguien peligroso y me puede hacer algo o si me ve algún preceptor me puede hacer algo o si me ve algún preceptor me puede poner un castigo porque a lo mejor salir de noche y divagar por los pasillos está prohibido pero no, creo que no porque no me han dicho nada de eso.
Cuando salgo al pasillo veo un poco a lo lejos la figura de alguien.
Cada vez se acerca más y a mí me carcome la duda.
¿Qué hago?
¿Me meto dentro de mi habitación o sigo mi camino como si nada?
Me quedo paralizada sin saber que hacer y suplicando que no me vea.
Pero no hay suerte, el chico se acerca a mí y se planta delante de mí.
--Hola-Le digo. Es un chico muy guapo y atractivo.
--Hola, preciosa, ¿Me podrías hacer un favor?-Me dice mirándome con ternura en sus ojos azul añil. En sus ojos hay ternura pero seguro que cuando se enfada es capaz de todo así que primero quiero saber el favor, aunque ya sé que se lo voy a hacer no vaya a ser que sino me haga algo.
--Eh…no se. Prueba.-Digo un poco asustada y muy nerviosa porque si no os habéis dado cuenta es un chico y los chicos me ponen nerviosa. Y más si son guapos, me llaman preciosa y no sé si son peligrosos.
--Oye, no tengas miedo de mí, ¿Vale? Lo digo porque pareces asustada. ¿Podrías ir a la cafetería y comprarme algo de comer? Es que a mí no me dejan pasar dentro, bueno, hasta mañana no me dejan.-Uy, sino le dejan es que es un chico peligroso, y bueno para estar aquí normalmente tienes que ser peligroso, y a él se le nota que lo es, mejor cuánto antes le hago su favor y ya está.
--Vale, ahora te traigo algo.
--Te acompaño hasta la puerta de la cafetería.
Él iba a mi lado y estaba a escasos centímetros de mí. Cada vez me estaba poniendo más nerviosa.
--¿Por qué no te dejan entrar en la cafetería?-Dije esperando que esto no le hiciera ponerse agresivo.
--Porque me han castigado. Me fui de fiesta y volví fuera del horario permitido.
--Entonces, antes, cuando se oía ruido en el pasillo ¿eras tú junto con el director?
--Supongo que sí. ¿La puerta de tu habitación es en la que estabas apoyada sin saber exactamente que hacer?
--Sí.
--Entonces estás en frente de la mía. ¡Estaba deseando que una chica ocupara esa habitación! ¿Eso quiere decir que eres nueva?-Uy, ¿pero para que está deseando eso? ¿Quizás para someter a una chica a su voluntad?
--Sí, es la primera vez que estoy en un reformatorio.
--¿Estas por una causa en especial?
--Huir de la policía. Ya te contare, no estoy preparada.
--No te preocupes, estaré esperando. ¿Estás nerviosa? ¿O es que la situación te pone nerviosa?
--¿Qué situación?-Me hago la despistada.
--Son las 3 y pico de la madrugada, estamos solos en casa y prácticamente esto está a oscuras. Ah, se me olvidaba, estamos solos tú y yo. Yo no le tengo miedo a la gente pero yo intuyo que tú sí.
--No, yo no le tengo miedo a nada y no estoy para nada nerviosa. No sé porque iba a estarlo, si no me importa nada. Y que sepas que te hago este favor porque yo también iba a comprar algo.-Le digo falsamente aunque se nota que estoy mintiendo, y mejor que se note no vaya a ser que se lo crea, se vuelva peligroso y me pegue.
--Sí, claro-Dijo.
Me acercó con delicadeza a la pared de tal forma que si quisiera salir no podría hacerlo porque él estaba delante de mí.
Agarró una de mis manos y su otra mano la puso suavemente en mi cintura.
Estaba tan cerca de mí que casi podía oír el latido de su corazón.
--Mírame a los ojos-Me dijo. No quería hacerlo, ¿Y si me cautivaba con sus ojos? ¿Y si de esa forma se me notaba que estaba nerviosa?-Por favor, déjame contemplar esos lindos ojos.-Esto me estaba poniendo cada vez más nerviosa y no ayudaba para nada el sentir mi mano entre su mano, su otra mano posada en mi cintura y sus ojos contemplándome como si yo fuera la chica más bella que hubiera visto nunca, y el miedo que le tengo a que me haga algo horrible como castigo.
--¿Para qué? Mis ojos no son nada fuera de lo común-Le dije cuando por fin le miraba a los ojos; Sus ojos eran tan…no se tan todo, estaban llenos de tanta ternura y albergaban tanta vida en su interior, estaban pidiendo a gritos que alguien le quisiera…Eran tan profundos, y a la vez tan peligrosos que me daban escalofríos.-Tus ojos si que son lo más increíble que he visto nunca. Expresan tanto que son muy especiales.-Mejor no decir nada malo de él, así no tiento la suerte.
--Me gustaría perderme en tu mirada.-Dijo sonriéndome y acercando su cara un poquito más a la mía.-Se sincera conmigo, ¿Eres tan dura como intentas aparentar o es solo una máscara? ¿No estás nerviosa? Yo creo que cada vez estas más nerviosa y eso es porque cada vez estoy más cerca de tus labios. Estoy oyendo que tu corazón late cada vez más deprisa.
Este chico me da tantísimo miedo…pero a la vez me resulta tan fascinante…mejor ser sincera y así seguro que no me pasa nada a no ser que se enoje por la mentira.
--Estoy nerviosa, por la situación y porque inevitablemente los chicos me ponen nerviosa. Era todo una máscara pero ten en cuenta que no es tan sencillo dejar de actuar por miedo a que te hagan daño.
--Vale, solo quería que lo reconocieras. Vamos, tengo hambre.-Dijo separándose de mí y agarrándome fuertemente de la mano.
Por fin llegamos a la cafetería y yo saqué varias cosas de las máquinas, para él y para mí.
Salí de la cafetería y aquel chico me estaba esperando con los brazos cruzados y la mirada perdida.
--Toma, esto es para ti.-Le dije sonriéndole y dirigiéndome lo más rápido posible hacía mi habitación, cuanto antes me aleje de él, antes dejaré de tener miedo porque me haga algo.
--Te lo pago mañana-Dijo alcanzándome.
--No hace falta, te invito. Me muero de sueño así que me voy a dormir.
Fuimos en silencio hasta que llegamos a nuestras respectivas habitaciones.
Justo cuando estaba apunto de entrar en mí habitación se acerco a mí y….
Me dio un beso en la mejilla que me dejo embobada, y me dijo:
--Por cierto, ya eres la chica más linda del reformatorio y todavía no sé tu nombre. Yo me llamo Chris.
--Yo me llamo Lisa- ¿Tienes novia?-¿Por qué no me callo? No puedo ponerme de novia con este chico, yo viviría con el miedo constante de que me hiciera algo pero siempre tendría este terrible miedo y yo no puedo así.
--No, en todo caso serías tú. ¿Te gustaría?-Realmente me encantaría, sería una gran recompensa estar con un chico duro porque me podría proteger de los demás, y hay algo de él que me atrae. Estoy apunto de decirle que sí cuando acerca su boca para besarme, yo cierro los ojos dispuesta a disfrutar de la sensación de ese beso llevada por un impulso, cuando a escasos centímetros de mis labios se aparta y me vuelve a hablar- Perdona, creo que estoy un poco borracho, lo siento mucho, hasta mañana, Lisa.
Mierda, yo que estaba deseando que me besara y va y al final no lo hace, bueno así mejor no puedo tener un novio al que tenga miedo, creo que esto ha sido lo mejor aunque es una pena que parezca tan peligroso, y que yo siempre tenga miedo a lo que me puedan hacer pero así tendré que vivir.

NIVEL UNO ESTADIO 1:: Miedo al castigo porque en todo el tiempo que ha estado con él y desde que ha empezado a narrar hasta el final ha dejado ver el miedo que tiene a que la castiguen, o a que la hagan algo malo, y admite que es una pena vivir así pero que ella lo hará.

Mireia López Hernández 4ºF

6 comments:

Hana said...

Y nunca llegara a vencer ese miedo?? Se quedara ahi, huyendo del resto de gente por miedo? Que triste... No le desearia eso a nadie. Lo mejor es enfrentarse a los miedos, para poder ser libres.

Mayu said...

Ola de nuevo. Ombreeee... espero k venza el miedo... sino... la vida no merecería la pena. Me encanta tu última frase final. Este también es un artículo para otro examen de ética k me pidieron. (de ahí la explicación tb al fnal del artículo..)

Hana said...

Ah, vale. Solo espero que nunca te sientas identificada con ella, porque entonces si que voy ahi y te doy. Te lo juro

Mayu said...

No te preocupes. Muak ^.^

Angela said...

tras leer todo lo que has escrito, te digo que este es uno de mis relatos predilectos.

me gusta el chico, qu eparece como una sombra, misterioso y enigmatico se asemaja a un angel caido del cielo para arrebatarle a lisa sus mascaras y protecciones.
y es ahi cuando ella se ve tal y como vive, llena de miedos y nervios por vivir.
una criatura que obecede por miedo a las represalias, que se descubre sumisa y temerosa.

solo espero que no te identifiques con ella, que no sea un personaje basado en tu misma existencia.
y de ser asi no esperes a que te llegue el angel que te revelara por que luchar sino lucha por superar los miedos y temores del dia a dia.

bueno tras el sermoncito, solo felicitarte, sabes que adoro tu forma de escribir.

besitos

Mayu said...

GrAcias por tu post Angela, no, no es una historia `` personal ´´ está medio sacada de una historia mia (sobre todo el chico...) y era parte de una historia que tuve que escribir para los examenes de ética. Pero me parece muy bien lo que me has dixo.